Mis palabras, a lo mejor, no serán escuchadas. Tal vez se pierdan, en algún recondito lugar. Pero no me importa. Mis palabras son la única cosa que me pertencen. Ni mi arte, ni mi tiempo, ni mi amor: serán eternamentes míos. "Mi" arte pertenecerá a otras personas; mis lienzos pasarán de unos a otros... sin que nadie entienda mis sentimientos. "Mi" tiempo, no es para nada mío. Él se acaba, se escapa de mis manos como finos granos de arena entes mis dedos. "Mi" amor, no me pertenece. Es propiedad de aquel que inunda mis pensamientos; que se ahoga entre ellos.
Y aún, te atreves en pregunta: ¿por qué no lo llamo MÍO?
Pienso tan parecido a Madame que me da un poco de miedo.
ResponderEliminar(bonito texto)
Besos
(un texto genial)
ResponderEliminar*-*
p.D: ME ACABO DE ENAMORAR DE ESE YOU ME AT SIX QUE SUENA, no sabía que te gustaran :)